La Inteligencia Artificial (IA) no solo está revolucionando cómo trabajamos y gestionamos nuestros negocios, sino que también plantea preguntas complejas que necesitamos responder si queremos asegurar un futuro digital seguro y equitativo. En el marco del curso «Impulsa tu empresa con IA», María Dapena se adentró en este tema con dos módulos clave: los riesgos éticos y legales de la IA y las estrategias de digitalización.

IA y Ética: Cuando el Progreso Debe ir Acompañado de Responsabilidad

Es indudable que la IA tiene un enorme potencial para las empresas, permitiéndoles mejorar procesos y personalizar experiencias. Sin embargo, con este poder también vienen grandes responsabilidades. Los sistemas de IA, especialmente aquellos que manejan grandes cantidades de datos, pueden influir en decisiones sensibles, desde la selección de candidatos hasta la concesión de créditos. ¿Cómo asegurarse de que estos sistemas no reproduzcan sesgos o incluso los amplifiquen? Según Dapena, el primer paso es la transparencia: conocer los algoritmos y garantizar que no existan prejuicios incorporados.

Esta sesión también abordó los dilemas éticos relacionados con la privacidad. La IA se alimenta de datos, pero la privacidad de los individuos no puede pasar a segundo plano. Europa ha dado pasos sólidos en esta dirección, con regulaciones como el Reglamento General de Protección de Datos (GDPR), que busca garantizar que el uso de los datos respete siempre la privacidad del usuario. Sin embargo, queda mucho por hacer en la práctica, y es aquí donde la concienciación empresarial juega un rol determinante.

Una Regulación Europea Pionera: La Ley de Servicios Digitales

Europa ha entendido que la innovación sin regulación puede derivar en un entorno digital caótico e incluso peligroso. La nueva Ley de Servicios Digitales (DSA) es otro ejemplo de la apuesta de la Unión Europea por un entorno digital justo y seguro. Este marco normativo busca proteger a los usuarios y promueve que las plataformas digitales sean más responsables en la gestión de contenidos, evitando que se conviertan en caldo de cultivo para información falsa o dañina.

Dapena subrayó la importancia de que las empresarias comprendan el alcance de estas leyes, no solo para evitar sanciones, sino para hacer de la digitalización un proceso ético y seguro. La Ley de Servicios Digitales tiene como objetivo principal una mayor transparencia en el ecosistema digital, permitiendo que los usuarios sepan exactamente cómo sus datos son tratados y utilizados, y que tengan vías para ejercer su derecho de revisión.

Estrategias de Digitalización: Innovar con Precaución

A nivel práctico, María Dapena presentó un enfoque equilibrado y realista para implementar la IA en pequeñas y medianas empresas. Hacer de la digitalización un pilar estratégico implica no solo adaptar la tecnología, sino también respetar los límites éticos y legales. La creación de planes de digitalización, alineados con los valores y normativas europeas, es el camino hacia una transformación responsable.

La formación organizada por AEPA y respaldada por la Consellería de Innovación, Industria, Comercio y Turismo es una oportunidad inestimable para empresarias y emprendedoras, quienes tienen en sus manos el desafío de liderar la adopción de la IA con responsabilidad y conciencia social.